Abro los ojos. Me levanto. Abro el cajón. Saco mi cajita de la vida. Me detengo. La abro. La cierro. Me siento. Miro el reloj. Cierro los ojos. Siento mi corazón. Miro al cielo. Veo el techo. Apago la luz. Suspiro. Vuelvo a abrir la caja. Recuerdo. Planeo. Meto todos mis sueños. Mis ilusiones. Mis esperanzas. La vuelvo a cerrar. Me pierdo. Giro la llave. Cierro la mano. La abro. Abro la boca. Me trago la llave. Enciendo la luz.
A partir de ahora la solución esta en mí.
Sonando. + Joaquín Sabina Por el boulevard de los sueños rotos.
PD.: Gracias a todos los que comentaron ayer. Si ya estaba decidido a hacer esa lista de cosas ahora lo estoy mucho mas. El espíritu de la contradicción. Deformación profesional. Lo único que no haré será llegar a fin de mes.
Voy a ver si así sale donde tiene que salir... si no...lo siento mucho Princesa :(.
Qué bonito...qué envidia... Yo creo que muchas de las llaves las perdí, y nunca me veo con fuerzas reales para buscarlas... Y menos para tragármelas.
Debo ser demasiado perezosa...o tonta.
Ánimo, vas a hacerlo muy bien.
Esto es una locura Jesús. Cómo es eso de redireccionar los comentarios??? (Porque por si no lo sabes los comentarios que se hacen aquí salen en un post de "Y entre mis historias, el viento") La leche xD.
Por supuesto que la solución está en un@ mism@.
Procura leerte a tí mismo esas letras cuando los desfavorables elementos externos ten empiecen a hacer pensar lo contrario.
Es lo mejor, así nadie podrá abrir esa caja y manipularla a su antojo, eres el único que tiene la llave!
Escrito por Lyzzie a las 19 de Junio 2004 a las 04:31 PM